Arzak depuis 1897

When Juan Mari told his mother he wanted to study catering and continue in the tradition of the family business, she tried to convince him to choose a career offering a better future. Sixty years later, the social prestige enjoyed by gastronomy is enormous, the change has been revolutionary and today many children encouraged by their parents dream of becoming great chefs. Juan Mari has lived this evolution in first person and has been a fundamental part of it. Arzak, the family eatery situated at the top of San Sebastian’s Alto de Miracruz, has become one of the world’s best restaurants. Today, the new generation has taken up the baton. Elena Arzak, Juan Mari’s daughter, now runs the restaurant and her father is gradually retiring. The time has come to look back, to take stock of a whole life; to analyse the transformation of traditional cuisine into the new cuisine d’auteur.

Cuando Juan Mari le dijo a su madre que quería estudiar hostelería, ella intentó convencerle de que apostase por una carrera con más futuro. Sesenta años después el prestigio social de la gastronomía es enorme, el cambio ha sido revolucionario y hoy en día muchos niños animados por sus padres sueñan con ser grandes cocineros. Juan Mari ha vivido esta evolución en primera persona y ha sido parte fundamental de ella. Arzak, la casa de comida familiar situada en el Alto de Miracruz de San Sebastián, ha pasado a ser uno de los mejores restaurantes del mundo. Ahora, la nueva generación ya ha tomado el relevo. Elena Arzak, la hija de Juan Mari, ya está al frente del restaurante y el padre se va retirando poco a poco. Es momento de reflexión, de hacer balance de toda una vida. Momento de analizar la transformación de la cocina tradicional en la nueva cocina de autor.